Puntos del pie para mejorar tu espalda
La reflexología podal es una técnica englobada dentro de las técnicas naturales y energéticas. Traducida literalmente como la ciencia de los reflejos, la reflexología permite trabajar a través de estos cualquier tipo de desequilibrios en el organismo.
En el cuerpo existen numerosos puntos reflejos sobre los cuales es posible ejercer un estímulo e incidir con ellos en órganos o zonas determinadas. Esto es gracias a nuestro sistema nervioso. El cual posee mayor número de terminaciones nerviosas en zonas concretas, creando así zonas reflejas de mayor relevancia. Estás se encuentran principalmente en las zonas distales del cuerpo: cabeza, manos, orejas y pies.
En nuestro organismo fluye una energía vital, conocida por los orientales como Qi (chi) la cual fluye por canales energéticos. El correcto fluir de dicha energía en un cuerpo garantiza un buen estado de bienestar. Por el contrario, los bloqueos de Qi generan molestias y dolencias en la zona de bloqueo concreta o enfermedades que afectan a todo nuestro organismo.
Las principales zonas reflejas del organismo son: pies, manos y orejas.
Hoy os vamos a enseñar unos puntos reflejos concretos que están vinculados con los plexos nervioso de la columna, cervical, dorsal y lumbar. La estimulación sobre dichos puntos es algo que se puede hacer en cualquier momento del día, desde casa, mientras se está relajado en el sofá o en la cama.
¿Cómo lo hacemos?
- En primer lugar la persona que vaya a recibir el masaje debe estar relajada, a ser posible tumbada.
- Podemos antes de la estimulación directa realizar un masaje previo, que ayude a sedar poco a poco. Deben ser manipulaciones suaves. a un ritmo lento. Deja que tu intuición te lleve en este proceso.
Localizaremos 3 puntos.Para la zona cervical: realizaremos una palpación directa con nuestro dedo pulgar en el lateral de la articulación interfalángica. Es decir, en la primera línea articular del primer dedo del pie. Donde el dedo realiza la primera y mínima flexión que puede hacer.
Para la zona dorsal: realizaremos igualmente una palpación directa con nuestro dedo pulgar en el lateral de la articulación metatarsofalángica. Es decir, en la segunda línea articular que nos encontramos en el primer dedo del pie.
Para la zona lumbar: realizaremos la palpación al final del borde interno del primer metatarsiano. Justo donde articula con la primera cuña.
¿Cuánto tiempo?
Las presiones en cada punto deben durar el tiempo suficiente hasta que el dolor punzante y localizado que se manifestará remita. Si este dolor es difícil de soportar podemos realizar otra técnica que consiste en presiones variables de unos 12 segundos intercaladas con descansos. O bien realizar círculos concretos, pequeños, sobre los puntos de dolor en el sentido contrario a las agujas del reloj.
Con estas manipulaciones sencillas podemos desde casa ayudar a mejorar nuestro bienestar de forma sencilla y natural. Por supuesto no supone ningún tipo de tratamiento en sí mismo, ni debe ser sustituto de las prescripciones médicas. Pero si pueden complementar perfectamente el trabajo sanitario, como podría hacerlo una infusión o un buen baño caliente.
El blog dePiesyManos tiene un carácter informativo. No pretende, ni puede ser considerado o sustituido por un diagnóstico médico. Consulte con su médico siempre cualquier consejo que desee tomar.